noviembre 30, 2014

Todo cambia

Todo cambia con mariposas en el vientre y pájaros en la cabeza, todo cambia con unos ojos marrones y unas pestañas rizadas fijas en la memoria de un otoño lejano. Cambian los intereses, cambian los deseos, cambian hasta las prioridades. Porque si esos ojos marrones volvieran a mirarme de aquel modo en que lo hicieron hace kilómetros, no me importaría perderlo todo para seguirlos hasta otros valles.